La existencia de materia oscura es probablemente una de las incógnitas fundamentales de la ciencia actual y desentrañar su naturaleza se ha convertido en uno de los objetivos primordiales de la Física moderna. A pesar de representar el 85% de toda la materia en el Universo, no sabemos qué es. En su descripción más simple está formada por partículas que interaccionan entre sí y con la materia ordinaria solo a través de la gravedad. Sin embargo, esta descripción no se corresponde con ningún modelo físico. Averiguar qué es la materia oscura pasa por encontrar evidencia de algún tipo de
El modelo jerárquico de la evolución de las galaxias sugiere que las fusiones de galaxias tienen un impacto sustancial en los intrincados procesos que impulsan el ensamblaje de la masa estelar dentro de una galaxia. Sin embargo, medir con precisión la contribución de las fusiones a la masa estelar total de una galaxia y su equilibrio con la formación estelar in situ plantea un desafío persistente, ya que no es directamente observable ni se infiere fácilmente a partir de datos observacionales. Utilizando datos de MaNGA, presentamos predicciones para la fracción de masa estelar que se origina
Observaciones realizadas con el Telescopio Espacial James Webb (JWST) han revelado un número de galaxias masivas mayor de lo esperado cuando el Universo era todavía joven. El objetivo de este estudio es precisamente una de estas galaxias, ZF-UDS-7329. Es un objeto muy compacto y su espectro sugiere que se formó en una etapa muy temprana, cuando el Universo tenía alrededor de 2 mil millones de años. Según las predicciones teóricas, estos objetos primero formaron una generación de estrellas en el centro de sus halos de materia oscura y posteriormente siguieron crecieron al fusionarse con otros